La Universidad de Costa Rica tiene ubicados en Finca 3 los siguientes cuerpos de agua declarados:
La Quebrada Sin Nombre. Conocida como Quebrada La Cangreja, se ubica a un costado de los gimnasios, en la cual se hará el vertido de las aguas ya tratadas del nuevo sistema de tratamiento de aguas residuales, que optimizará el saneamiento de las instalaciones deportivas. También recibirá las aguas pluviales del edificio de la Oficina de Bienestar y Salus (OBS).
Un acuífero confinado. La Finca 3 se encuentra sobre un acuífero confinado, esto significa que es un acuífero que se encuentra bajo capas de baja permeabilidad que lo confinan y le dan cierta protección ante la contaminación. Este acuífero se encuentra a una profundidad superior a los 45 m, alcanzando según registros de pozos cercanos un caudal de 15 l/s. De hecho, este acuífero es captado por el pozo AB-734 (el pozo de la piscina). Este pozo fue construido en el año 1978 y sigue en uso actualmente, con los permisos correspondientes. La extensión de este acuífero no es conocida, pero abarca mucho más que la Finca 3 de la Universidad de Costa Rica, incluyendo las comunidades circundantes. La profundidad a la que se encuentra el nivel de agua subterránea ha sido reportada a 45,7 m (Alpízar, 2017) y 46,7 m (Alpízar y Vargas, 2021).
Un acuitardo. Al respecto del área de proyecto de la Oficina de Bienestar y Salud, mediante la revisión de la base de datos de pozos del SENARA, Vásquez (2014) indica que dentro de las capas de lahares y cenizas existen niveles colgados de agua subterránea. Esta unidad la clasifica como un acuitardo y señala que esto quedó demostrado en los estudios de suelos en donde se reportaron niveles de agua a menos de 10 m de profundidad, que no corresponden por ende a acuíferos, sino a niveles colgados por las diferencias de permeabilidad de esta unidad.
No. El 11 de marzo del 2022, la Dirección de Agua del Minae realizó una inspección en este sitio y el 16 de marzo emitió un nuevo dictamen, el cual indica que no existe tal naciente.
En perfiles hidrogeológicos realizados a partir de los niveles de agua subterránea, reportados en perforaciones de octubre de 2012, mayo de 2016, julio 2016 y febrero 2017 se observa que los niveles de agua colgados más someros, se reportaron a 5,2 m de la superficie. Inclusive, en febrero 2017 no se reportaron niveles de agua en las perforaciones, por lo que se concluyó que no existen manantiales dentro del Estadio Ecológico (Barahona & Valverde, 2018).
Aunado a esto, en diciembre de 2021, al final de la época lluviosa, se realizaron 3 perforaciones geotécnicas de más de 4 m de profundidad dentro del Estadio Ecológico. Uno de los puntos perforados se hizo junto a la caja de registro señalada por la Dirección de Agua como naciente intermitente. Luego de la perforación se introdujo una sonda de nivel de agua y no se encontró ningún nivel de agua subterránea (Garnier, 2021). Por esta razón se descarta, nuevamente la presencia de una naciente en este punto. De haber existido una naciente se hubiera medido el nivel del agua subterránea desde los 0 cm de profundidad. VER: Informe de determinación de nivel freático en Estadio Ecológico.
Como se registra en los estudios Geotécnicos adjuntos, IG 059-16 Bienestar y Salud, IG 081-16 Bienestar y Salud (adicional) y IG 040-17 Bienestar y Salud (segundo estudio adicional), realizados para el diseño, cimentación y construcción de ese proyecto, los perfiles estratigráficos detectan niveles freáticos entre 4,95 m y 7,65 m de profundidad dentro del área y la profundidad estudiada.
Por ello, al realizar los movimientos de tierra y excavaciones pertinentes, se presentan flujos subsuperficiales que afloran a las profundidades indicadas, los cuales se bombean y utilizan para riego de áreas verdes y el manejo de los taludes del área del proyecto. Una vez que generan saturación de los suelos se disponen a un sedimentador que desfoga al tragante más cercano del sistema de alcantarillado pluvial existente en la Finca 3, que finalmente conduce a la Quebrada Sin Nombre.
Lo anterior, como una medida ambiental temporal, mientras se finalizaban los movimientos de tierra, y que cuentan con la supervisión de un inspector de la Oficina Ejecutora del Programa de Inversiones y el Regente Ambiental de SETENA.
Además, es importante aclarar que la Universidad no se encuentra drenando o extrayendo agua de la zona con tanquetas, para trasladarla fuera del campus, como aseguran las publicaciones del perfil Salvemos la Naturaleza de las Instalaciones deportivas de la UCR. Dicha agua se dispone en el sitio de la construcción.
A solicitud de la Rectoría, la Escuela Centroamericana de Geología se encuentra realizando estudios técnicos dentro de la Finca 3 orientados a mejorar el conocimiento del contexto geológico e hidrogeológico de la finca.
Actualmente se está en una etapa de trabajo de campo y de laboratorio, la cual incluye el uso de distintas técnicas, una de ellas es la geofísica, la cual es una herramienta que permite estudiar las propiedades de los materiales geológicos en profundidad, de forma indirecta. A finales del 2021, se realizaron dos perfiles geofísicos para conocer la constitución del subsuelo; esta actividad se realizó en conjunto con el Centro de Investigación en Ciencias Geológicas.
Próximamente se planea realizar pruebas físicas en el campo y análisis de laboratorio de muestras de suelo y agua. Finalmente, con base en toda la información analizada, se realizarán perfiles hidrogeológicos y se preparará un modelo hidrogeológico conceptual detallado que ayude a entender de mejor manera lo que ya se conoce sobre la Finca 3.
Además, desde la Escuela de Geología, se está analizando la colaboración para realizar algunas pruebas geotécnicas en la colindancia de la Finca 3, que buscan beneficiar a las personas vecinas de esa área.
La Universidad se encuentra denunciada ante el Tribunal Ambiental Administrativo desde 2017, por las señoras Mikki Bors de Barquero y la señora Paulina Mata Monge, como consta en el expediente Nº: 232-17-01-TAA. Las vecinas han denunciado a la UCR aseverando la afectación de una supuesta naciente intermitente en el Estadio Ecológico y recientemente alegan la ruptura de un supuesto acuífero en el área del proyecto de la Oficina de Bienestar y Salud.
Ante estas denuncias, la Universidad ha recibido en distintas ocasiones a la Dirección de Agua y al personal de dicho Tribunal con el objetivo de brindar información técnica y científica que acompañe el proceso legal; de igual modo se ha recibido a la SETENA.
Cabe destacar que la misma denunciante, la señora Paulina Mata, en los escritos más recientes que presentó ante el Tribunal Ambiental Administrativo, dio razón a la Universidad en cuanto a la inexistencia de una naciente en el Estadio Ecológico.
La Dirección de Agua visitó la Finca 3 el viernes 11 de marzo para atender la denuncia de la señora Paulina Mata, por la ruptura de un supuesto acuífero en el área del proyecto de la Oficina de Bienestar y Salud, para lo cual ella aportó como evidencia vídeos de agua acumulada en las excavaciones realizadas como parte del movimiento de tierra para la cimentación de la obra. Por su parte, la Universidad envió mediante un oficio de la Unidad de Gestión Ambiental, los estudios realizados por la Escuela Centroamericana de Geología para mejor resolver al respecto.
El 16 de marzo de 2022, la Dirección de Agua como ente competente en materia de cuerpos de agua, emitió un informe técnico, el cual descarta la existencia de un cuerpo de agua de dominio público en el sitio indicado por la denunciante, sino que se trata de un afloramiento provocado durante la excavación del proyecto para la construcción del edificio.
A pesar de que ya se rindió el informe por parte de la Dirección de Aguas, la Universidad de Costa Rica debe esperar hasta tanto el Tribunal Ambiental Administrativo proceda a resolver conforme a derecho y levantar la medida cautelar decretada mediante la Resolución N° 313-22-TAA. Hasta que el Tribunal resuelva levantar la medida cautelar, la Universidad puede continuar con la ejecución total del contrato para la construcción del Edificio de Bienestar y Salud.
El proyecto cuenta con todos los permisos requeridos para su construcción, tanto a nivel legal, como contractual y ambiental. La Secretaría Técnica Nacional Ambiental (SETENA), otorgó la viabilidad ambiental correspondiente, mediante la Resolución Nº 1193-2016-SETENA. Esta licencia ambiental se obtuvo tras la presentación del Estudio de Impacto Ambiental (EsIA), como instrumento técnico predictivo que analiza los proyectos, obras o actividades respecto a la condición ambiental del espacio geográfico en que se ubicarán.
A partir de este análisis, la UCR valoró los posibles impactos ambientales que las obras pueden causar sobre el ambiente y definió un conjunto de medidas ambientales para prevenir, corregir, mitigar o compensar estos impactos.
La Universidad ha mantenido abiertos los canales de comunicación desde la Rectoría y la Vicerrectoría de Administración para atender consultas y brindar información a la ciudadanía. También, se repartieron volantes con información sobre la obra el pasado 10 de diciembre de 2021, casa por casa, en los barrios cercanos a Finca 3. Asimismo, se pueden encontrar referencias y canales de comunicación en la siguiente página de http://construye.ucr.ac.cr/proyectos/edificio-de-la-oficina-de-bienestar-y-salud-obs-etapa-1.html
Para ello, se pone a disposición de la ciudadanía el correo electrónico: recepción.rectoria@ucr.ac.cr para recibir inquietudes, observaciones y quejas sobre el proyecto. Todo lo anterior, en atención a la transparencia y la responsabilidad social, como se hace con todos los procesos constructivos de la Universidad, en el marco legal vigente.
